Hierro para mejorar el rendimiento físico

La hemoglobina es un compuesto fundamental para el transporte de oxígeno hacia todos los tejidos, por lo que su disminución presenta dificultades en el rendimiento de ejercicios físicos de larga duración (aeróbicos).

El hierro forma parte de la molécula de hemoglobina, asimismo actúa en las reacciones enzimáticas que se producen dentro de la célula (mitocondria), específicamente en una reacción llamada cadena respiratoria, fundamental para la generación de energía en las actividades físicas aeróbicas.

Puede apreciarse, por tanto, el papel que juega el hierro, y su disminución en el organismo, en el rendimiento físico. Se puede perder hierro a través de la piel, las heces, las mucosas y la orina, alrededor de 1 miligramo por día. El sudor contiene aproximadamente 300 microgramos de hierro por litro.

Los alimentos de origen animal, (hígado, pescado, carne vacuna, yema de huevo) contienen hierro en una forma química que permite una mejor absorción, que el hierro contenido en los vegetales. Asimismo, hay ciertos nutrientes que favorecen la asimilación del mismo como la vitamina C y las proteínas.

El hierro, es por tanto, un compuesto necesario para el organismo que frecuentemente no se advierte su disminución. La adecuada incorporación no sólo es positiva para deportistas recreacionales y de alto rendimiento, sino para la salud en general de todas las personas, dada su incidencia en la sensación de cansancio crónico.

Sin embargo, la suplementación con hierro, debe ser siempre recetada y prescripta por el médico y evitar la automedicación, porque en definitiva se trata de la ingesta de un metal y por tanto se debe realizar con cuidado y control para no sobrecargar a los órganos internos.