Arteterapia: las distintas escuelas
Tres enfoques diferentes para la misma herramienta
Como en toda disciplina humanística, los enfoques y las escuelas en arteterapia se multiplican a la par de las visiones y conceptos que los profesionales y expertos van elaborando con el tiempo. Aquí presentamos los tres enfoques más difundidos.
Escuela junguiana
Centrada en los estudios de Carl Jung, en este enfoque arteterapeútico se explora mayormente la relación que pueda existir entre el creador y la imagen o artefacto artístico producido, mediante los cuestionario y el diálogo.
En este caso, el arte funciona como mediador entre el paciente y el terapeuta, y la creación artística es estudiada como una extensión de la psicología del paciente.
Asimismo, se intentan relacionar los productos artísticos con el presente, el pasado y el futuro de la persona, teniendo en cuenta las aspiraciones, deseos o trabas emocionales que puedan significarse mediante el arte.
Escuela humanista
El arteterapia humanista elimina, en primera instancia, toda aquella actitud que pueda sugerir un juzgamiento o que indique criterios sobre lo bueno y lo malo en el marco del ambiente creativo.
Para la psicología humanista, sobre la cual se basa el arteterapia del mismo enfoque, el ser humano sano es aquel que desarrolla todo su potencial sin limitaciones de ningún tipo, incluyendo por supuesto a la creatividad.
Según esta escuela, los materiales y técnicas artísticas como la pintura, el movimiento o la fotografía deben ser utilizados para potenciar la escucha interior, la atención y la espontaneidad de la persona.
Escuela psicoanalítica
Aquí el enfoque elimina la interpretación del arteterapeuta. El individuo debe efectuar sus interpretaciones del producto artístico y hallar sus significados propios, recibiendo la colaboración del profesional en cuanto a las formas de canalizar sus expresiones.
Estas expresiones incluyen mensajes visuales, tonos de voz, lenguaje corporal y contenido verbal.
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