Feng Shui: ¿cómo puede ayudarte a armonizar tu casa y tu vida?

Una familia de tres, Marta, Miguel y su hija Laura de siete años. Cuando me llamaron querían armonizar su hogar con el feng shui, lo más necesario era que su hija durmiera en su habitación, ya que no habían podido conseguirlo y tenía ya siete años, siempre se levantaba y muchas veces acababa durmiendo con ellos.

También querían mejorar su suerte pues Miguel no estaba muy valorado en su trabajo y quería ascender o cambiar a otra empresa donde estuviera mejor. Decían que siempre habían tenido mala suerte en el trabajo de Miguel y que se les habían escapado algunas buenas oportunidades durante su vida, cuando había otras personas que parecía que la suerte les sonriera, su caso era completamente al revés. Llevaban viviendo 15 años de alquiler en la misma vivienda.

Escuchando sus necesidades y después de realizar un análisis con mis varillas feng shui donde pude detectar varias afectaciones de geopatías o radiestesia, una de ellas justo en la habitación de Laura, les propuse colocar los remedios para estos casos.

Además la vivienda me estaba mostrando algunas otras cosas: teníamos ausencia en ayudas (lo que producía su sensación de continua mala suerte) además del aseo con ducha de María también en ayudas y una afectación en su habitación principal: tenían el baño entre su habitación y el vestidor con dos puertas enfrentadas, había un pasillo de paso en el lugar del lavamanos y la ducha y el inodoro estaban cerrados en el interior. En principio, tener separado el inodoro y la ducha del lavamanos es bueno, pero tal y como estaba colocado no era favorable, puesto que las dos puertas enfrentadas producían un escape de energía demasiado rápido.

Esta afectación podía producir que se les ?escaparan? oportunidades. No podíamos cambiar el baño con una obra puesto que estaban de alquiler y no deseaban realizar una reforma importante, de hecho si se producía el ascenso esperado de Miguel querían cambiarse a un piso más grande y con algo de dinero que tenían ahorrado a lo largo de los años comprarse una vivienda de propiedad, pero claro necesitaban un poco de ?ayuda? para que el ascenso llegara.

Potenciamos prosperidad, corregimos las ausencias de ayudas con espejos en el comedor y en la entrada y para el escape de las puertas enfrentadas del baño colocamos un espejo detrás de la puerta que daba al vestidor, desde el lado del vestidor y una esfera de cristal tallado colgada en la mitad de las dos puertas en el baño.

Lo más significativo fue potenciar ayudas y corregir las ausencias, en la entrada pusimos una lámpara de sal que se encendía de forma automática todos los días y en una caja en el recibidor colocamos escritos en un papel las peticiones que deseábamos se hicieran realidad, incluyendo por supuesto el cambio de trabajo o el ascenso de Miguel.

Después de colocar los remedios de geopatías, Laura a los pocos días, dejo de levantarse por las noches, al principio Marta me contó que se levantaba ella, extrañada y preocupada pues no estaba acostumbrada a que Laura durmiera de un tirón, de hecho llevaba siete años levantándose por la noche y le parecía increíble que se hubiera resuelto tan rápido.

Los siguientes resultados no se hicieron esperar mucho, una restructuración de la empresa produjo que se cambiaran puestos de trabajo y aunque algunas personas entraron en un expediente de regulación a Miguel le dieron un cargo de más responsabilidad y le ascendieron, pero eso sí, había una condición importante: que se trasladara con su familia a Madrid (ellos vivían en Barcelona) y para el cambio la empresa les proporcionaba una vivienda allí, un piso más grande y en una muy buena zona.

Lo hablaron y se decidieron a dar el cambio, quizás más adelante comprarían su vivienda de propiedad, pero ahora la vida les daba una oportunidad y querían cogerla, por supuesto quisieron armonizar su nueva vivienda con feng shui. Si la vida les había puesto otro hogar diferente delante querían escuchar lo que esa casa tenía que decirles, pero no querían esperar tanto tiempo como en esta, pues la verdad, llevaban 15 años experimentando mala suerte hasta que corrigieron la afectación de ayudas, no es necesario tener que vivir una mala experiencia tanto tiempo, si podemos verla y corregirla antes, nuestra vida podrá seguir su camino con más rapidez.

*Los nombres del artículo han sido modificados para preservar la intimidad de las personas. Los protagonistas me han autorizado a escribir su historia con la finalidad de que su experiencia sirva para la mejora de vida de otras personas.