Ejercicios posturales para la espalda

La propiocepción sirve para que el cuerpo pueda detectar el movimiento y posición de los diferentes segmentos articulares y así, por tanto, definir la postura que ocupa en el espacio.

El ejercicio físico no se limita a desarrollar la fuerza, la resistencia o la velocidad, también existen actividades que desarrollan el sentido cinestésico y la percepción espacio temporal.

Ejercicios de postura

• De espaldas al suelo. Piernas estiradas. Brazos al costado del cuerpo. Activar el abdominal llevando el ombligo hacia adentro. La espalda lumbar no tiene que estar separa del suelo más que el ancho de un dedo. Elevar una pierna extendida hasta los 90º cuidando de mantener la espalda en posición neutra, es decir, de la misma forma en que se inició el ejercicio, sin que aumente ni disminuya la curvatura. Repetir 10 veces de cada lado.
• De pie. Brazos al costado con palmas hacia abajo. Flexionar levemente las piernas que están separadas el ancho de hombros. Coloca la espalda recta, eliminando las curvaturas fisiológicas normales que tienen. Para hacer esto deberás replegar ligeramente la pelvis y estirar la columna cervical hacia el techo. Permanece en esa posición respirando normalmente, percibiendo los cambios de tensión y relajación de los músculos y sosteniendo la espalda lo más vertical que puedas.

La finalidad de estos ejercicios es que aumentes tu sensibilidad neuromuscular para que puedas adoptar posturas correctas. Recuerda que la buena postura depende de la mejor posición que puedas adoptar en el espacio-tiempo y ésta depende de tu desarrollo perceptivo.