Cómo cocinar el apio
Cómo preparar el apio
El apio es uno de los vegetales que resiste todo tipo de cocción, preparación y usos culinarios. Exquisito en ensaladas, fácil de consumir crudo, pero también factible de ser incorporado a comidas calientes, resultando un excelente aromatizante, casi una especia más. Pruebalo en sopas, guisados, salteados y en la variedad que se te ocurra. El apio no ha de faltar en tu mesa.
Formas de preparacion del apio
Dentro de las hortalizas, no todas pueden ser aprovechadas por completo y de manera uniforme. Pero ese no es el caso del apio, que resiste cualquier tipo de cocción y preparación. Quedará a tu criterio como consumirlo. Puedes emplear sus hojas, sus semillas y también, por supuesto, sus pencas, donde se encuentran las mejores propiedades, tanto de sabor como nutritivas.
Pero... ¿como se come el apio? Pues de tantas formas diferentes, que es muy importante que conozcas las formas más habituales de emplear un vegetal que está repleto de propiedades muy benéficas para tu cuerpo. ¡A disfrutar del apio en cualquier momento del año!
Crudo
Desde luego, comer el apio crudo es como más te garantiza que vas a conservar sus propiedades intactas. Es por esto mismo que puedes aprovechar de emplearlo así cada vez que puedas. Lo más común es consumirlo en forma de ensaladas. Dentro de ese tipo, la más habitual es la waldorf, pero hay muchísimas opciones más en donde puedes combinarlo.
¿Y cómo preparar el apio en ensalada? Pues simplemente cortándolo bien fino en forma transversal. O en finas tiras longitudinales. Puedes mezclarlo con repollo, tomate, manzana, pera, rúcula, nueces, almendras, quesos, pollo o pavo, por citar tan sólo algunos ingredientes que quedan bien con el apio.
También, a la hora de tomarlo crudo puedes aprovechar a cortar los bastones y usarlos como "galleta" para untar dips. Prepara una mayonesa de zanahoria, un queso crema aderezado y el untable que más te guste, en donde mojarás debidamente tu tallito de apio. Mucho más saludable y crujiente que tomar un trozo de pan.
Cocido
Claro, está también puedes consumirlo cocido. Para cocinar el apio simplemente tienes que hervirlo y luego lo puedes emplear como más te guste. Está bien que no es la forma más sabrosa de consumirlo pero puedes preparar una increíble sopa con base de apio, que resultará además muy diurética y depurativa para tu organismo.
A su vez, si no sabes cómo cocinar apio como elemento secundario, puedes pensar en el él como si fuera una especie, un condimento. Es que tiene una gran capacidad de dar sabor y puedes tanto sus tallos como sus hojas para el añadido en guisados, sofritos, sopas o todo tipo de preparación a la cacerola. Mezclado con puerro, cebolla y zanahoria hace una base perfecta para cualquier guiso, ragout o sopa. Verás que le da un aroma y sabor único, que lleva la inefable marca del apio.
En bebidas
¿Quieres saber cómo se puede preparar el apio? Pues preparando un caldo o infusión. En la primera opción, lo hierves con agua, tanto tallo como hojas, durante de 10 minutos, apagas el fuego, tapas durante 15 minutos más y luego cuelas. Bebes cuando te apetezca. Si quieres hacerlo en infusión, apagas el fuego ni bien rompe hervor y lo dejas tapado durante 10 minutos, antes de colar y beber.
Desde luego, el apio es un genial ingrediente para todo tipo de jugos y batidos. Tiene mucho líquido, aporta gran sabor, es depurativo, detox y sienta muy bien con manzana, zanahoria, pera, hojas verdes o zumos de cítricos, entre muchísimas otras opciones posibles.
En semilla
Más allá de las recetas con apio cocido o crudo que puedas hacer, también sus semillas se pueden utilizar. Claro está, se tuestan levemente y luego se muelen, empleadas como condimento con su típica frescura y aroma.
Sea como sea, el apio puede ser parte de tu dieta diaria. Es fácil, sólo es cuestión de que lo incorpores.
Los mejores remedios y recetas con apio
Ahora que ya sabes cómo cocinar el apio de diferentes formas posibles... ¿por qué no pones en práctica estas ideas con algunas recetas que también son excelentes remedios caseros para tu salud? Aquí tienes algunas sugerencias que te van a resultar más que bien en tu día a día.
- Jugo de apio y pepino. Dentro de las recetas con apio crudo, los jugos son algo imperdible. Esta opción es de las mejores para cuando quieres limpiar tus riñones: apio y pepino.
- Ensalada de apio, repollo y manzana. Si te gustan las ensaladas bien crujientes y con mucho sabor, una combinación de repollo, apio y manzana es imbatible. Ideal para acompañar pollo al horno o asado.
- Agua de apio. Con apio puedes preparar una excelente agua que sirve como depurador renal y también del sistema digestivo. Y no sabes lo fácil que se prepara.
- Crema de apio y guisantes. Dentro de las recetas con apio cocido, nada como las sopas crema. Esta receta en particular se hacen en thermomix y combina apio con guisantes.
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