Cuatro razones para disfrutar de un rico chocolate

Según señala la jefa de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Andrés Bello Viña del Mar, Mónica Jiménez, las múltiples propiedades del chocolate se pueden resumir en energético, estimulante, relajante, y antioxidante.

El chocolate fue descubierto a principios del siglo XVI en América y desde entonces se ha convertido en un producto excelente que ha causado sensación en toda Europa, donde hoy en día existe toda una cultura en torno a su producción y consumo.

Según Mónica Jiménez, las múltiples propiedades del chocolate se pueden resumir en cuatro: energético, estimulante, relajante y antioxidante. Al ser un alimento rico en proteínas es muy usado por los deportistas "porque en pequeña porción tienes una gran cantidad de energía por los hidratos de carbono de la leche -los que contienen leche, que es la mayoría-, la manteca de cacao y el azúcar", segùn señala Mónica Jiménez.

A pesar de su alto poder calórico, existen variedades ligeras muy aconsejables para personas diabéticas o aquellos que se desviven por cuidar su peso. Además, existen preparados con leche descremada y otros con fructosa o sucralosa en vez de sacarosa que están igualmente deliciosos.

Los efectos estimulantes del chocolate en el sistema nervioso proceden de la cafeína y la teobromina, sustancias que aumentan de los niveles de actividad motriz y cognitiva, así como refuerzan la vigilia, el estado de alerta y refuerzan la atención, de ahí que la especialista aconseje a los estudiantes tomarlo en época de exámenes puesto que potencia la concentración.

Además, de sobra son conocidos sus efectos placenteros gracias a las sustancias neurotrasmisoras que se producen con su ingesta. Por eso es recomendado para mujeres que sufren de síndrome premenstrual o personas con depresión. Otra propiedad antioxidante surge por los flavonoides, pigmento vegetal que impide la formación de las moléculas de radicales libres responsables de la oxidación y el envejecimiento celular.